El empresario y el luchador hablan de estrategia electoral

7 de enero de 2000. El avión privado de Donald Trump aterriza en el aeropuerto de Minneapolis-St. Paul y una limusina blanca traslada al célebre hombre de negocios a un encuentro con el Gobernador de Minnesota Jesse Ventura. En plena fase exploratoria de una candidatura presidencial por el Partido de la Reforma, Trump busca el consejo y el endorsement del ex luchador profesional, ex actor del cine de acción (aquí un podcast de uno de los tres peliculones en los que trabajó: Perseguido) y ex locutor de radio que en 1998 propinó un tremendo tortazo a la clase política del estado de la Estrella del Norte.

Michael Kranish y Mike Fisher recogerán la visita de Trump a Ventura en su libro Trump Revealed (Trump revelado):

"Trump y su prometida, Melania Knauss, se van al ático del Northland Inn de Brooklyn Park, un suburbio de Minneapolis, donde les esperan una docena de miembros de la campaña electoral de Ventura. Trump les dice que quiere aprender cómo un hombre que empezó en la parte de atrás de las encuestas, considerado como una broma por algunos, terminó convertido en gobernador. ¿Cómo derrotó a políticos muy conocidos como el alcalde de St. Paul?

"Dean Barkley, el hombre que presidió la campaña de Ventura, aconseja a Trump: "Simplemente sea honesto. No se trata de lo que diga, sino de cómo lo diga. Y no hable a la gente, hable con ellos". Phil Madsen, quien dirigió la operación de Ventura en Internet, cuenta a Trump cómo utilizaron Internet para solicitar donaciones y difundir su mensaje.

"Trump pregunta sobre la salud del Partido de la Reforma después de la pelea entre Ross Perot y Ventura sobre su misión. Trump expresa sus dudas sobre hacerse miembro de un partido que incluye a Pat Buchanan y David Duke, el antiguo líder del Ku Klux Klan. Trump pregunta en voz alta si las diferencias son reconciliables. Pero Barkley no puede ofrecerle ninguna seguridad en que lo sean.

"Más tarde, Trump y Ventura aparecen en una comida de la cámara local de comercio. Trump el oyente da paso a Trump el farandulero. Se burla de los candidatos republicanos, provocando risas: "¿Son estos tíos unos cadáveres o qué?"".

El plato fuerte de la jornada es una rueda de prensa conjunta emitida por C-SPAN en la que los dos grandullones comparten atril.

"Si decido presentarme, él me apoyará. Pero todavía no he decidido presentarme", es lo que ha dicho Trump horas antes a los periodistas que viajaban en su avión. "Si decido presentarme, siento que tengo muy buenas posibilidades de conseguir el apoyo de Jesse".

En la conferencia de prensa, el gobernador no le da su respaldo oficial pero le asegura "toda mi consideración" si decide presentarse.

Un reportero del New York Post, el periódico que más seguimiento hace de las andanzas de Trump, pregunta al empresario por qué antes de bajar del avión estaba tan seguro de que Ventura le daría su apoyo.

"Yo no he dicho eso. ¿Cuándo he dicho yo eso?", reacciona Trump. "Es el 'New York Post', no te preocupes. Es el 'New York Post', no te preocupes", le dice a Ventura."Míralo, si ni siquiera lo discute. Está bien, es el 'New York Post'".

Trump y Ventura están totalmente de acuerdo en una cosa. Ninguno de ellos quiere a Pat Buchanan como el nominado del Partido de la Reforma.